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El poder del cambio, el útero creador. SOMOS MUJERES


Hoy en 52 paises del mundo hay paro de mujeres. Revista Sapukay se suma compartiendo un texto de la compañera Analía que además nos presenta a su amiga militante, Amelia.

Por Analía Calderón .

Soy mujer, y hoy, reivindico el día internacional de la MUJER.

Si bien sostengo que todos los días son los días para todo, un 8 de marzo de 1914 se fija la fecha dedicada a la MUJER LUCHADORA, y es, en este día, que se reafirma la plena participación, en condiciones de igualdad, de la mujer en la vida política, civil, económica, social y cultural.

La trágica muerte de más de 100 mujeres que sufrirían un incendio, acabo con sus vidas dentro de una fábrica textil que les brindaba condiciones laborales precarias en 1911, en los Estados Unidos, activando así años más tarde todos los movimientos en pos de alzar las voces por las mujeres y sus derechos de igualdad.

Niñas, adolescentes, adultas, madres, tías, abuelas. Las hay niñeras, enfermeras, alumnas, estudiantes, abogadas, maestras, juezas, amas de casa, vecinas, desocupadas, doctoras, modelos, actrices, cantantes, divorciadas, violadas, rubias, coloradas, morochas, casadas, solteras, separadas , nativas, activistas, voluntarias, europeas, africanas, locas, putas, desempleadas.

Las hay de todo tipo, son ellas, somos nosotras, las mujeres, el género femenino del que tanto se habla, al que tanto se golpea, y al que tanto se desaparece y al que tanto se mata.

Algunas sumisas, otras altaneras, otras más rebeldes, otras cómplices, y otras ausentes.

No creo en el cambio del sistema patriarcal al mando de los hombres, el fin del patriarcado se dará cuando la mujer no compita con otra mujer, cuando el género tenga la capacidad de sensibilizarse ante otro par. Ante otra mujer, ante otra madre, ante otra profesional, ante otra, simplemente, ante otra igual.

Si criamos hijos a los que les enseñemos que lavar los platos también es de hombres, la sociedad machista entenderá que la cocina también les pertenece. Y así la condición de igualdad comenzará a equilibrar la balanza y la mujer solo tendrá que ser mujer. Condición más hermosa de todas.

Si tenemos en nuestra naturaleza el don de parir hijos, también podremos tener el don de parir cambios. Pero los cambios se logran con acciones activas. Con el compromiso individual que pronto se vuelve colectivo. El compromiso de no callar nuestras voces. El compromiso de gritar bien alto cuando las cosas no están bien.

Cuando te levanten la voz, cuando te levanten la mano, cuando te intimiden con la mirada y a veces con los silencios. Siempre hay una herramienta que nos saque de las situaciones más violentas de todas, pero una realidad es que muchas veces nos ha ganado el MIEDO. El miedo a no contar, a no pedir ayuda, a sentirnos equivocadas y hasta de creernos locas. Las locas de la historia. Las manipulaciones terminan dominando nuestros miedos.

Conozco muchas mujeres, y he visto en mí, muchas mujeres. Desde la bebe en el vientre de mi madre, la niña sumisa, la adolescente inconformista, la estudiante perseverante, la profesional cuestionadora, la pareja no tan perfecta, y hasta la madre que cría a su hijo, en este presente como mejor le sale.

No en vano es el dicho “cada persona es un mundo”, y en ese mundo interno y en el circundante existen millones de mundos personales a los que uno se enfrenta día a día.

Hemos crecido en sistemas machistas, autoritarios, demandantes, opresores. Hemos soportado desde temprana historia sometimientos atroces. Nos han cortado la cabeza y nos han quemado en hogueras. Pero el fuego sigue intacto en cada mujer. Las generaciones venideras a épocas antiguas han acarreado con toda una carga social pregnante y es hora de que podamos liberarnos de ataduras a las que no nos merecemos. Es hora de respirar sin la soga al cuello y poder levantar la frente y exigir no más de lo que corresponde. No exijo igualdad, VIVO EN IGUALDAD. Cambiemos los patrones desde el habla hasta la acción. YO TE DIGO QUE SOY IGUAL QUE VOS.

El 8 de marzo de 2017 se lleva a cabo un paro internacional de mujeres en mas de 41 países de todo el mundo, y en Argentina más de 60 ciudades se adhieren al mismo. Este suceso será parte de un hecho histórico que agigante un canal de lucha de acción y participación, ubicándonos a las mujeres en las protagonistas de nuestra propia historia.

Somos nosotras quienes tenemos que habilitar el rol que nos corresponde y para eso es necesario que en cada noche que apoyemos la cabeza en nuestra almohada, hagamos la revisión del día y analicemos a cuantas acciones machistas nos hemos enfrentado y cuantas de ellas fueron generadas por nosotras mismas. Lo importante es poder ver y trabajar sobre nuestras propias sombras.

Al estado le digo, No te permito más niñas violadas, no te permito mas abortos ilegales, no te permito que decidan por nosotras, no te permito que me raptes y me desaparezcas, no te permito que me faltes el respeto, no te permito que no cumplas con tus obligaciones, no te permito que abuses de mi supuesta debilidad de género. Porque ser mujer es ser valiente y acá estoy contándotelo.

En homenaje a todas las niñas, adolescentes, mujeres y abuelas maltratadas, abusadas, denigradas, olvidadas, desaparecidas y muertas. En homenaje a todas las mujeres del mundo. En homenaje a todo mi linaje femenino, a mi abuela Juana y a mi mamá Teresa. A las que ya no están, a las que estamos y a las que estamos por llegar.

*Madre, artista plástica y docente.

7 -03-2017

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